Raven: Sabes cuando yo me imaginé... cuando yo me prometí tener algún día el valor de decirte cuanto te amaba no pensé que sería así, de esta manera. George, George ¿Por qué me pones las cosas tan difíciles? Aunque tal vez es eso de lo que me vuelve loca de ti, estoy tan acostumbrada a que me den la razón que tú al venir a mi empresa con tus ideas "revolucionarias" me diste una jaqueca que duró meses, hasta se me ocurrió despedirte. Tengo que ser sincera lo único que te salvó fue el hecho que nos encontráramos de casualidad ese día en el bar en Barranco, yo estaba bastante tomada, de otro modo no hubiera dejado que te me acerques a charlar, me cuesta tanto abrirme con las personas... pero fuiste tan amable, gracioso... por primera vez pude entender el punto de vista de una persona con ideas contrarias a las mías, no tienes la menor idea de cuanto te agradezco por mostrarme un mundo diferente. Sabes fue una muy hermosa amistad, pero se convirtió en amor, oh bueno por lo menos para a mi, hasta donde yo se claro; es gracioso.. lo dejó en duda para consolarme un poco.
Enfermera: (tratando de interrumpir sutilmente) Señorita, la familia Steel ya está lista.
Raven: Etiendo. (Susurrando al oído de George) Duerme tranquilo que el dueño de la camioneta ya está preso por conducir bajo ebriedad, nunca más hará daño a alguien.
Doctor: Antes de proceder debo explicar el proceso una vez más, al desconectar la máquina que mantiene vivo al señor George Steel no sentirá nada, en los primeros segundos será como enviarlo a dormir un poco más profundo de lo que él ya está, luego...